Plasma Rico en Plaquetas (PRP)
El Plasma Rico en Plaquetas es un material biológico autólogo, se obtiene de la misma sangre del paciente, tomando una muestra por una punción venosa, que posteriormente se centrifuga para separar los distintos componentes (glóbulos blancos, rojos, plaquetas, plasma). Una porción del centrifugado contiene plasma rico en plaquetas, que son las células que participan en la coagulación. Estas poseen un gran número de sustancias llamadas “factores de crecimiento” que promueven la migración y división celular. Estos factores tienen el potencial de estimular la respuesta reparativa de los tejidos y como bioestimulador de la piel activa el rejuvenecimiento cutáneo y sirve para en el manejo de pacientes con alopecia areata y androgénica.
En dermatología el Plasma Rico en Plaquetas (PRP) se usa en el control de la alopecia androgenética tanto masculina como femenina, la alopecia areata y en la biosetimulación de la piel de la cara generando rejuvenecimiento facial.
La decisión de cuando realizar el procedimiento del Plasma Rico en Plaquetas depende del paciente y el motivo del tratamiento. En general se puede realizar en cualquier momento al ser un procedimiento mínimamente invasivo con una duración de 50-60 minutos. Es importante tener en cuenta que en la mayoría de los tratamientos será necesario más de una sesión.
El PRP al ser autólogo, tiene un riesgo mínimo de ocasionar reacciones inmunes o de trasmisión de enfermedades infecciosas o contagiosas. Las reacciones descritas por el uso de PRP son extremadamente raras. Los principales riesgos incluyen infección local (<1%) y dolor en sitio de inyección y la aparición de pequeños hematomas.
Estas definiciones pueden ayudar a identificar enfermedades o patologías pero nunca deben tomarse como herramienta de autodiagnóstico. Recomendamos encarecidamente consultar a un especialista si creen identificar alguna enfermedad, patología o cualquier duda que le pueda surgir al respecto.